miércoles, 27 de agosto de 2008

Tímido, agazapado,... te digo nuevamente

Te quiero hacer mi Isla griega preferida.

GRATITUD

Me siento enormemente satisfecho de este espacio. Me gusta escribirme sabiendo que me podeis leer. Para mi tiene un efecto catártico impresionante. Es mi reflexiologo particular abierto a todos vosotros.

Me DOY LAS GRACIAS por VALIENTE y olé.

Fin del verano, glub¡¡¡

Hoy no soy nada, no consigo nada. Tengo la ilusión,... y parece que no llega. Soy una bomba de neutrones por dentro. Bien dentro. Tan dentro que hacia fuera no sale más que desesperación y resentimiento.

Me siento perdido. Como te pueden dejar tan desubicado. No tendría que ser tan sencillo pasar de cero a cien. ¡¡¡No puede estar permitido¡¡¡. Nadie me va a defender. ¡¡¡No hay justicia¡¡¡.

Todo esto no son más que rodeos. No sale lo de dentro. Me cierro una y otra vez. Dolor de me han dejado colgado. Dolor de no me han querido. Dolor de no me hacen ni puto caso. Hay veces que sin sentido me gustaría volarles la cabeza.

Solo quiero gritar¡¡¡ Irme, desaparecer. Cuanta angustia dentro de mi.

Me siento solo y desamparado.

Desde hace dos semanas me resumo en algo parecido a esto. Ya me lo conozco porque llevo así toda mi vida. Siempre me han podido las circunstancias.

Y ahora me gusta tener este espacio para escribirme y recordarme como no dejarme vencer, porque ahí esta la clave. Si siempre me vencen porque me desactivan no puedo proponer una vida viable. No hay más que promesas casi nunca cumplidas.

Así que ese es mi reto actual. Y para conseguirlo me tengo que querer. Y si me quejo y quejo, no me quiero. Y si no me quiero no quiero. Y al final, no hay vida ni amor ni...

Si me quiero y me valoro salgo del dolor y la queja. Busco soluciones, pregunto, busco que me enseñen lo que no se. Pongo en práctica lo aprendido. ¡¡¡Y que se jodan los malos¡¡¡

Y que viva yo, mi vida y los que quiero y creen en mi.

Como me quiero. ahora mientras escribo me acuerdo de las sensaciones que viví en la playa en Granada. Hace menos de un mes y se me había sumergido en el pozo. El peligro del reverso tenebroso. Ese día era Luke jedi y últimamente más me he parecido a un Anakin poseso de odio.

Me reconforta sentir esa sensación ya vivida que me calma dentro y aplaca la angustia desactivando la bomba de relojería en la que estoy convertido. Doy gracias por haberme permitido crear este espacio que tanto bien me hace, y por ser tan valiente como para recorrer el camino que deseo.

Me han doblegado dos semanas. Y es mucho tiempo.

Ni un minuto más¡¡¡


miércoles, 6 de agosto de 2008

Avanzar

El sábado pasado me adentre en el mar nadando como nunca antes lo había hecho. Ayer, en bici por la casa de campo, grite a todo pulmón mi asma-nopuedorespirarmeagobio. Pueden parecer hecho casuales pero no lo son. Los estoy buscando.

En el mar me metí y quise ir más allá de las boyas. Esa banalidad me costo lo mío porque conforme me iba acercando a ellas todo mi cuerpo se paralizaba. Ya ves. El caso es que al final pase de las boyas y me quede allí un buen rato (lo cual forma parte del juego porque normalmente llego, toco y me piro lo más rápido que puedo). Quede contento. Me permitió luego quererme bien y eso me hizo recuperar la igualdad como persona con respecto al mundo. Algo tan sencillo y que nos resulte tan complicado: sentirnos iguales.

Ya he identificado que cuando pierdo la igualdad, y soy yo el que la pierdo, me derrumbo. Ahí ya me cargo con una bonita serie de pesados fardos que me van tirando para abajo. Ese fue mi aprendizaje. Fui algo más allá y me encontré a mi mismo.

Además luego estuve un buen rato paseando por la playa (como la canción), porque necesitaba encontrarme antes de volver con mi mujer, y también llendo más allá me volví a encontrar. En vez de darme por satisfecho por lo que ya tenía seguí paseando y conforme iba y venía por la playa un camino se abrió dentro mí (y olé). Trás la primera cortina con la que normalmente me conformaba (paripes los llamo) estaba lo que yo quería y lo que hacía falta.

Después de eso, y ya de noche, me volví a bañar, otra vez hasta más allá de las boyas. Y entonces ya estaba preparado para volver con ella. Me gustó. Disfrute mucho de mi. DISFRUTAR DE MI¡¡¡ Me gusta.

Y olé.