sábado, 12 de julio de 2008

Dar el salto

Este es un escrito del estilo que no le gusta a mi mujer. Yo la quiero igual. Ella es mi más feroz crítica y también la luz que me llena el corazón. Siempre, hasta cuando esta insoportable y no hay quien la aguante. Como decía Jesucristo: "una palabra suya bastara para sanarme". Es así. Lo vivo con ella.

He dado un salto. Roto mi límite, la barrera que me mantenía acongojado. Años de trabajo cristalizados en una maravillosa tarde.

La duda de volver a repetirlo. La inseguridad de hacer consciente algo natural. La conciencia del abuso y la dificultad. NO

Yo trabajo por nuestra felicidad. SIEMPRE. Y ello me honra. Merezco otra cosa. La conciencia me salva la vida. La conciencia superior. La que te permite ubicarte incluso en los momentos más desesperados. La que posibilita que cuando no hay salida la encuentres, que hagas magia. La conciencia que nos une a nuestra ALMA.

En este mundo despechado hay tanto dolor y tantas heridas. Y el error de prescindir de lo espiritual. Lo entiendo y desgraciadamente lo he vivido durante muchísimo tiempo. Nos han engañado tanto. Esas Iglesias vergonzosas. Pero no podemos dejar por ello de renunciar a unirnos en la conciencia del ALMA, en lo ESPIRITUAL. Es una experiencia, que una vez vivida se revela como necesaria para el pleno desarrollo de la vida.

Y yo dando saltos. Y ahora soy clave en la relación. Siempre lo he sido y no me daba cuenta. Cuanto dolor dentro de mi y en ella. Tortura. Y siento toda la responsabilidad que ello supone. Y me doy cuenta de donde estaba al inicio del camino. Incapaz. Mi padre. Y lo que me han enseñado entre él y mi madre. Incapaz. No son culpables, pero hay que decirlo. Es así.

Quiero que mejoremos. Quiero que no nos vengamos abajo cuando esta claro que vamos hacia delante. Nuestros dolores y ansiedades. No pueden vencer. No nos pueden separar. Ahí siento un trabajo necesario. Tan necesario como el que ya estoy haciendo para ser SIEMPRE SU HOMBRE.

Estabilidad verdadera basada en que somos el uno para el otro. Ponemos lo mejor de nosotros y vamos rompiendo límites. Ya no más dudas. Ya valoración de los que somos cada uno y en conjunto. Ya vivir una vida de construcción que nos lleve mucho más allá. A esos hijos tan deseados. A vivir con alegría cada paso dado.

2 comentarios:

Unknown dijo...

Muchas felicidades por el trabajo, por los años, por la cristalización, por la apertura de contar en la red algo tan desnudo... por el salto.
Felicidades a los dos.

dácil dijo...

ha sido super emocionante leerte, muchas gracias Pablo