miércoles, 26 de noviembre de 2008

30 de octubre, interior de Cerdeña, más allá

Continúo camino. El paisaje sigue igual. Montañas cubiertas de bosque. Los pueblos son ya claramente de montaña. Aparecen colgados. Belvis y Aritzo (reino de las Castagnas y Nociola de Sardegna). Bonitos. También algo más turísticos. Esta zona merece una visita más reposada en otra ocasión. Es una buena base además para acceder al macizo del Gennargentu, tapado hoy por la bruma. Se intuyen las plantaciones de coníferas.

La carretera sube un puerto (1.040 metros) con plantaciones también de coníferas. Aspecto alpino. Actividad forestal: aperos, madera apilada, cortas recientes, vacas por el monte,... Bajamos a una nueva foresta mediterránea (Ortuabi). Desde ahí ya desciendo y dejo atrás el increíble mar que me ha acompañado este día para adentrarme en un paisaje predominantemente agrícola y ganadero, de ovejas. Así hasta Barumini.

Llego a Barumini cuando anochece. Estoy cansado de la conducción y las curvas. Voy al albergue que me indica la guía. Consigo que me abran. Soy el único cliente. Lo dicho, temporada bajísima. El lugar es tranquilo y agradable. Rústico.

Tengo toda una tarde-noche por delante.

1 comentario:

Unknown dijo...

Hoy, por fin, he dedicado un buen rato a disfrutar de tu periplo isleño. Te felicito de corazón por estas crónicas, que son una verdadera gozada, una invitación a la isla a través de tu corazón y a tu corazón a través de la isla y los kilómetros.
Apabullo leer tu sinceridad y tu encuentro contigo mismo y devuelve, si fuera necesario, la fe en el hombre, en el que todos somos y en el que tú eres.
Valiente de Corazón. La Vida y el Amor son para ti.